PDA

Ver la Versión Completa : Aprende a vivir sin juzgar



Buscandome
30/03/2016, 21:10
APRENDE A VIVIR SIN JUZGAR



En mi opinión, nos hemos acostumbrado a emitir un juicio sobre cada una de las cosas que vemos o que nos afectan, y es un juicio que generalmente emitimos desde la creencia de estar plenamente acertados y en posesión de la verdad y la iluminación infinitas.

Cuando alguien emite un juicio, está totalmente convencido de que lo que está diciendo es irrebatible, porque es SU verdad, o sea, LA GRAN E INFALIBLE VERDAD.

Y no somos conscientes de que esos Juicios Rápidos que emitimos –por lo general con condena o consejo-orden ya incluidos- están emitidos desde una mente que no es clara del todo, que no dispone de una ecuanimidad sensata que aporte claridad y justicia, que está infectada por condicionamientos, y que funciona desde una visión parcial e interesada y desde unas creencias generalmente obtusas y cuadriculadas que no están abiertas al discernimiento, a la comprensión, a la mesura, a una clarividencia que permita apreciar correctamente, a la valoración del otro punto de vista, y a la comprensión de las circunstancias personales que han llevado al otro a hacer lo que se está juzgando.

Y lo que debiera ser nada más que una opinión o un punto de vista, se convierte en un veredicto que es un decreto convencido de que lleva la justicia en sus venas.

Actuar de ese modo es, por supuesto, una insensatez.

Lo apropiado es darse cuenta, sin emitir juicios. Sólo observar.

Y ser capaz de ver más allá de lo aparente.

Lo honorable es no juzgar y no condenar.

El Ser Humano, y no olvides que tú también eres un Ser Humano, es un cúmulo de contradicciones, es inexperto en casi todas las materias de la vida, es voluble, inseguro –aunque esa inseguridad pretenda ocultarla tras una “seguridad” que en realidad es agresividad-, se equivoca, en la mayoría de sus “errores” no hay mala intención sino desconocimiento, y actúa con buena intención en muchas ocasiones aunque los resultados de sus actuaciones hagan creer lo contrario.

Conviene recordar que cada Ser Humano está condicionado por todo el cúmulo de sus circunstancias y por su pasado, y conviene comprender y reconocer que si uno mismo hubiera estado en el lugar del otro, y hubiera tenido su misma vida, sus mismas experiencias, sus mismas vivencias, su misma educación, sus mismos problemas… hubiera actuado exactamente igual. Exactamente igual. Y es así.

“En aquellos días dijo Jesús: «Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo. No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.”

COMPRENDER, esta es la clave.

Comprender: Encontrar justificados o naturales los actos o sentimientos de otro. Hay que aceptar que son sus actos y que tiene sus razones, aunque no estén de acuerdo con nuestra mentalidad, nuestras normas o nuestros deseos. El otro es el otro. No tiene por qué ser yo ni por qué ser como soy yo.

Comprender: Entender, alcanzar o penetrar algo. Ir más allá de lo que la cosa aparenta. Captar lo que hay en el trasfondo. Ser abierto de mente y transigente. Aceptar la humanidad y su tendencia habitual a no ser conscientes de todas las cosas y todos los actos.

Lo que el otro haga o piense o diga es su asunto, y no tenemos por qué inmiscuirnos, ni por qué convertirnos en directores de sus vidas y sus decisiones; no tenemos que decidir por el otro ni decretar cuáles han de ser sus actuaciones ni de qué modo.

Vivir desde la observación aporta tranquilidad a la propia vida.

La función de cada uno en el mundo es vivir su vida, y no la de los otros mientras desatiende la propia.

La observación atenta a la vida permite darse cuenta de las cosas que de otro modo pasarían desapercibidas, y está muy bien que uno se fije en los otros porque son un excelente modelo del que aprender lo que uno quiere hacer o lo que no quiere hacer. Hasta ahí es correcto, y está muy bien. Cuando puede dejar de ser correcto es cuando uno dictamina sobre lo ajeno, y más teniendo en cuenta que uno nunca conoce todos los entresijos del otro ni todas las circunstancias que le han llevado a ser como es y actuar como actúa.

Al igual que nosotros, los otros tienen en esta vida su camino de aprendizaje y hay que respetar el modo en que deseen hacerlo. Nunca sabremos si lo que a nosotros nos parece un error resulta que para el otro es lo mejor que le puede suceder a largo plazo. Nosotros podemos opinar –si nos lo piden- aportando nuestro punto de vista, pero sin pretender defenderlo como verdad suprema ni con ánimo de imposición.

Es conveniente permitir que cada uno aprenda por su cuenta, decida por sí mismo, y gobierne su vida del modo que considere adecuado. Para algunas personas esto va a resultar muy difícil.

A modo de sugerencia, recomiendo a los salvadores de vidas ajenas que se entretengan en revisar la suya propia. Tal vez encuentren que las cosas que tanto les molestan en los otros de algún modo están en la suya.


Te dejo con tus reflexiones…


(Si te ha gustado, compártelo con quien creas que le puede interesar)
Más artículos en: http://buscandome.es/index.php?action=forum