Lo siento, en verdad lamento esta larga espera, pero ustedes saben, con esto de las fiestas, los regalos, la comida, la ropa, zapatos, etc, etc jajaja pues no quedaba tiempo y aun asi que tengo que revisar esta historia desde el primer capitulo y escribiendo otras, uff de correr jaja pero gracias por su comentarios, y esta historia sera lenta pero segura, luego publicare una mas corta, es precisa, conciza y no se que mas jajaja


CAPÍTULO VIII PARTE I

El tiempo pasaba rápidamente, había llegado le mes del amor, todas las tiendas estaban adornadas de corazones, no era extraño ver a la gente camina con globos, peluches o tarjetas de corazones, el clima era diferente, hasta más liviano en esta época o en realidad nadie más se daba cuenta de los cambios que sucedía a su alrededor, pues estaban ocupados pensando en que harían o como celebrarían ese día.

-¡odio a Yaten!, cuando debe estar jamás aparece –exclamo Mina, sosteniendo una silla sobre una de las mesas.

-no lo odias, eso es seguro, quizá tuvo algo que hacer, pásame las tijeras que no puedo cortar esto –dijo Serena parada sobre la silla, intentando cortar el lazo que sostenía el globo en la columna

-como sea, debería estar aquí y ese ¡tonto! de Seiya también –Mina hizo énfasis en “tonto”, estaba molesta, soltó la silla para ir por las tijeras, pero Serena vio hacia abajo al escuchar el nombre de Seiya, perdió el equilibrio, la silla dio vuelta y juntas venían a estrellarse contra el suelo, cerró los ojos con tal de solo sentir el golpe y no ver hacia donde caía, pero a Serena jamás le había parecido el suelo tan suave.

-veo que vengo a tiempo –dijo una voz que ha Serena le parecía tan conocida, abrió los ojos y se encontraba en los brazos de Seiya.

Sintió como el mundo dejaba de girar y la gravedad iniciaba a afectar y ni la voz de Mina la hizo girar – ¡por fin te apareces!, bueno ahora que estas aquí –dijo Mina tomando su bolso y dándole las tijeras a Serena, sin preocuparse en la posición que aun se encontraban sus amigos –terminen de adornar, yo iré por los arreglos de las mesas, regreso en –Mina vio su reloj –media ahora, ¡adiós chicos! –Serena y Seiya se quedaron allí parados, viendo como Mina desaparecía sin mayor preocupación.

-ya puedes bajarme, gracias –dijo Serena aun en los brazos de Seiya, en verdad eso la ponía feliz, Seiya le vio directo a los ojos, había perdido la noción del tiempo, sonrió y la coloco en el suelo. Jamás la había visto tan de cerca y detenidamente.

-no deberías hacerle caso a Mina, mira que subirte hasta esa altura, suerte que ahora que inicie el entrenamiento soy mas rápido –dijo Seiya quitándole las tijeras de la mano a Serena.

-quería ayudar y a ella le dan miedo las alturas, así que yo podía hacerlo, pero perdí el equilibrio –dijo Serena sonrojada, aun podía sentir las manos de Seiya sobre su cuerpo.

-ahora tenemos que terminar el trabajo de esa chica –Seiya paro la silla que si había llegado al suelo, pero no la necesito, el llegaba solo con la mesa, subió y coloco el primer globo.

-nunca he estado en una fiesta del amor –dijo Serena inflando un globo y viendo a Seiya con perspicacia.

-ah no, eso es extraño en una chica –dijo Seiya tomando el globo y amarándolo en la columna.

-así, ¿Por qué? –pregunto Serena.

-pues, eres una chica universitaria, la verdad no sé de donde saliste, pero a tu edad muchas chicas ya hasta casadas están –dijo Seiya amarrando otro globo.

-Salí de mi casa, y en el lugar donde vivía pasaba este día en mi casa –dijo e inflo otro globo.

-¿vendrás a la fiesta? –pregunto Seiya, tomando un globo ms y colocándolo.

-¿qué hacen este día? –Serena no respondió, solo volvió a preguntar y Seiya bufo, Serena podía ser muy preguntona.

-se dan regalos a las personas que quieres, dedican canciones, poemas, si te gusta alguien es el día perfecto en que puedes decírselo –dijo Seiya siguiendo amarrando globos.

-pero, eso se puede hacer todos los días –dijo Serena, tomando mas globos.

-sí, es verdad, pero ya sabes la gente necesita días especiales para hacer cosas especiales –dijo Seiya bajando de la mesa, habían terminado esa parte, aunque aún faltaba la mitad del salón.

-el otro día caminaba por la acera y la gente compraba miles de cosas en forma de corazón, creo que si es el tiempo, me dio por comprarle a Bony un corazón para su pecera –dijo Serena siguiendo Seiya con los globos, Seiya río.

-ves, haces cosas por amor –dijo riendo, a Serena le pareció que era hermoso verlo reír de esa forma.

-¿tu vendrás a la fiesta? –pregunto Serena.

-te debo una fiesta, el otro día, no me comporte como era, ¿quieres acompañarme? –Seiya se acerco a Serena y tomo los globos de su mano, esa actitud de Seiya hacia que le temblaran las piernas.

-no te preocupes –Serena sabía que Seiya podía despertar su mal genio si mencionaba algo más.

-entonces eso es un sí, pasare por ti a las siete, ¿qué te parece? –dijo Seiya subiendo a la mesa, su humor era diferente.

-bien –Serena no sabía que decir, Seiya se dio cuenta que en los ojos de la chica había incertidumbre. Bajo de la mesa, debía pedir disculpas.

-yo… -dijo y unas voces interrumpieron.

-no han terminado y por eso venimos a ayudar –dijo Yaten y Darién al unisonó.

-¡Yaten, Darién! –dijo Serena, aunque su corazón latía a mil, quizá jamás sabría lo que Seiya iba a decirle.

Entre los cuatro se apresuraron a adornar, Darién busco oportunidades para quedarse a solas con Serena, o al menos lo más lejos que pudiera, y nos descanso hasta que la encontró, Serena fue por mas globos a la cocina y él la siguió, aunque para Yaten y Seiya eso no paso desapercibido.

-oye princesa, creo que me porte como un canalla –dijo Darién recostado sobre el marco de la puerta, viendo a Serena sacar más globos. Serena se estremeció al escucharlo, había intentado esquivarlo muchas veces.

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ya publico la segunda parte!!