El amor es una decisión, por lo que dura lo que cada uno decida.
Debería ser lo que nos interese que sea feliz esa persona con quien nos gusta compartir: sentimientos, sueños, metas, emociones, nuestra propia vida.
Sin embargo, considero que rara vez lo vemos en beneficio del otro, pues anteponemos nuestra conveniencia y por ende decidimos hasta cuando dura