El cerebro de cada especie animal es como una computadora en la que ya se traen cargados algunos programas predeterminados, y esos programas, o formas de comportamiento, es lo que llamamos instinto. Al igual que con cualquier característica física, individualmente en el grupo de la especie existen pequeñas diferencias en sus características. En este caso, en sus formas de comportamiento, algo así como se define el carácter único de cada individuo. Evolutivamente, si algún individuo posee una característica que se adapte mejor a su entorno, entonces ese individuo tiene mejores posibilidades de supervivencia y de reproducción. Con ello, sus características prevalecerán ante otras, evolucionando de esa manera la especie.
Supongamos que una hormiga nace con el instinto de cavar galerías un poco mas grandes, y eso significa que puede almacenar mas comida para el invierno. Esa hormiga sobrevive un invierno en donde por falta de comida, murieron muchas hormigas. Entonces esa hormiga se reproducirá, y un mayor porcentaje de la población de hormigas tendrá el instinto de cavar galerías mas grandes. Empieza entonces a cambiar así el comportamiento de la especie de hormigas.